Sôgi. Shôhaku. Sôchô.
Poema a tres voces de Minase.
Renga.
Edición bilingüe.
Traducción y posfacio de
Ariel Stilerman.
Sexto Piso. Madrid, 2016.
A veintidós días del primer mes lunar del segundo año de la era Chôkyô, en 1488, tres poetas japoneses se reunieron en el santuario de Minase, cerca de Kioto, para hacer una ofrenda poética al antiguo emperador Go-Toba en el 250 aniversario de su muerte.
Acababa el invierno (La cima está aún nevada / la base de la montaña se cubre de niebla/al anochecer) y empezaba a despuntar la primavera en el paisaje: En el viento sobre el río / un grupo de sauces: / la primavera dejándose ver.
Con la técnica asociativa del renga, esos tres poetas –Sôgi, Shôhaku y Sôchô- fueron trenzando sus estrofas en el Poema a tres voces de Minase, que acaba de publicar en edición bilingüe Sexto Piso con traducción y posfacio de Ariel Stilerman.
Y así fueron enlazando en la composición sucesiva propia del renga cien estrofas para un homenaje que expresa -como indica el traductor- “la nostalgia por el esplendor perdido de la cultura aristocrática, de la que habían nacido las obras maestras de la literatura japonesa.”
Cien estrofas que evocan un mundo perdido y constituyen “la obra máxima de la poesía renga”, como señala Ariel Stilerman en el Posfacio en el que explica la técnica de enlace y progresión del renga.
La lluvia y el rocío, el transcurso de las estaciones del año, el viaje y la despedida, el lamento amoroso, la niebla o la nieve del paisaje como metáforas de los estados de ánimo o de la fugacidad de la vida son los temas que recorren estos poemas de tono delicado, de intensa brevedad que exige sutileza y concentración expresiva, sugerencias y elipsis en una mirada plástica y a la vez interior en la que lo que está fuera está también dentro del poeta y viceversa, cuando la soledad se aprende / del sonido del viento en los pìnos y el viento de otoño sabe al desamor / de una persona inconstante.
Santos Domínguez