José Luis Tejada.
Razón de ser.
Prólogo de Juan Bonilla.
Siltolá Poesía. Sevilla, 2017.
Hoy somos sólo un pulpo de ocho miembros
que raramente un tajo divino escindiría.
Tú yaces en la paz y entre mis manos
yo esgrimo el vellocino sagrado de tu sexo
donde acaso el amor duerma en simiente
o se vislumbre un sol de eternidad.
Anda, encaja en tus pechos mi corazón antiguo,
vamos, que aún sobra espacio entre nosotros,
acóplate a tus vanos como a un viento calino
y agáchate, que va a pasar la muerte;
no nos llegue a rozar.
Con esas dos estrofas termina Consolación de la carne, uno de los textos que forman parte de Razón de ser, el libro de José Luis Tejada que cumple ahora medio siglo desde su primera edición y que rescata La Isla de Siltolá en su colección de poesía con un prólogo de Juan Bonilla.
Esos son algunos de los versos más significativos del tono y los temas de este libro en el que sus treinta poemas, organizados en cinco secciones, reflejan el mundo poético de José Luis Tejada: la soledad, el vacío existencial, el amor y la poesía como formas de resistencia ante el desarraigo y la muerte.
Frente a su primer libro, el neogarcilasista Para andar conmigo, Razón de ser muestra una voz personal formada que ya sólo de manera esporádica mantiene la forma del soneto. El poeta ha optado ya por el verso libre, en el que se encauza mejor la torrencialidad apasionada de su expresión y el arrebato verbal de sus sentimientos de desarraigo existencial o su angustia ante el paso del tiempo y ante la muerte.
Esa es la temática predominante de la poesía de José Luis Tejada. “Una poesía confesional, de palabra cuidada pero sin miedo a la dureza de la desesperanza”, como señala Juan Bonilla en el prólogo, antes de destacar “la palabra que mejor puede resumir el espíritu del libro: una autenticidad que emociona en esa búsqueda incesante del amor como única razón de ser que nos dignifica contra la sinrazón de la nada.”
Por eso, frente a la sombra sin contorno del hijo de la muerte, frente a la indigencia común o la desolación de los habitantes de la noche, la única respuesta es la resistencia que ofrecen las palabras o el amor:
Ven conmigo ahora y mira
esa burbuja cálida en el centro sin vetas de tu sombra
que flota en viento, tierra, lo mismo da, o en el agua, con una
rueda en el hueco de las manos.
Cuando se cumple medio siglo de su primera edición, la recuperación de la voz poética de José Luis Tejada con la reedición revisada de Razón de ser, uno de sus mejores libros, brinda al lector actual la posibilidad de conocer una obra que, aunque casi olvidada, no desmerece de la de otros autores de los años centrales del siglo pasado.
Santos Domínguez