Baltasar Gracián.
Oráculo manual y arte de prudencia.
Los secretos de Diotima.
Guillermo Escolar Editor. Madrid, 2020.
"Más valen quintaesencias que fárragos", escribió Baltasar Gracián en una síntesis que resume la concentración conceptista.
Los secretos de Diotima incorpora a su catálogo el Oráculo manual y arte de prudencia de Gracián, una de las cimas de la prosa barroca y del pensamiento aforístico español y universal que contiene agudezas como esta, del epígrafe 205, por la que no pasa el tiempo, a la que cada lector podría poner una cara y un nombre:
Astucia de indignos: oponerse a grandes hombres para ser celebrados por indirecta, cuando no lo merecían de derecho: que no conociéramos a muchos si no hubieran hecho caso de ellos los excelentes contrarios.
O este otro, cuya fuerza está en hablar no de la envidia en abstracto, sino del envidioso sufriente y concreto con el que todos nos hemos cruzado alguna vez y que estaba agazapado, hace más de tres siglos y medio, en estas líneas del aforismo 162:
No muere de una vez el envidioso, sino tantas cuantas vive a voces de aplausos el envidiado, compitiendo la perenidad de la fama del uno con la penalidad del otro. Es inmortal este para sus glorias y aquel para sus penas.
Un clásico que no ha dejado de crecer desde su primera edición en 1647, un libro que se ha ido actualizando con cada lector y con cada época, en trescientos aforismos que resumen la sabiduría prudente y desengañada del intelectual discreto y profundo que fue Gracián, uno de los mejores prosistas de la lengua española.
Santos Domínguez