10/7/14

Georg Groddeck. El buscador de almas


Georg Groddeck.
El buscador de almas.
Traducción de José Aníbal Campos.
Sexto Piso. Madrid, 2014.

Mi amiga, la señora Agathe Willen, me encargó en su lecho de muerte que publicara la historia de su hermano, un tipo raro llamado Thomas Weltlein.

Así comienza El buscador de almas, de Georg Groddeck, en la versión de José Aníbal Campos que acaba de publicar Sexto Piso. Fue la única novela de uno de los fundadores del psicoanálisis y, tras varios rechazos de editores escandalizados, acabó publicándola Freud en el mismo sello editorial donde aparecieron los textos fundamentales de la teoría psicoanalítica.

Nada en ese comienzo algo insustancial en el que se repite el conocido método de inserción narrativa del manuscrito hallado hace esperar lo que se desencadena torrencialmente en sus páginas: una secuencia imparable de  asociaciones delirantes y divertidos disparates que son una provocación frente a las convenciones sociales, una desaforada manera de dar rienda suelta a los impulsos reprimidos.

Una de las novelas más divertidas de la temporada, sin ninguna duda.

Santos Domínguez