17/9/08

El París de d'Ors


Eugenio d’Ors.
París.
Traducción de Carlos d’Ors e Isabel Lacruz Bassols.
Prefacio de Carlos d’Ors.
Funambulista. Madrid, 2008.


Pere Coll ha muerto. (...) Y hete aquí que, debido a que Pere Coll ha muerto, yo me voy a París. Parto, con toda la alegría. ¡Me voy a ver cosas! ¡A ver muchas cosas!
¡Ver cosas…! Ésta es la gran Universidad de los hombres nuevos; y el mal de no haber pasado por ella, se hace, a partir de cierta edad, irremediable…

Funambulista publica París, una obra inédita de Eugenio d’Ors, dividida en tres partes, Glosas al vivir de París; París. Escenas y secretos y Otras glosas sobre París.

D’Ors llegó a París en 1906 para ver cosas como corresponsal del diario barcelonés La Veu de Catalunya. Allí empezó su Glosari, que firmaba como Xènius, y allí inició el camino que le convertiría en una de las referencias intelectuales del Novecentismo, el primer movimiento que instaló la literatura española en el siglo XX y la puso en contacto con la realidad cultural europea.

París era entonces, y lo seguiría siendo en el periodo de entreguerras, la capital cultural del mundo, la cuna y la sepultura de las vanguardias artísticas y literarias. De ahí la importancia de estos textos en los que Eugenio d’Ors fue aportando inyecciones diarias y revitalizadoras de modernidad que serían decisivas en la literatura española de los años veinte.

Dos terceras partes de las setenta y dos Glosas al vivir de París las escribió d’Ors entre la primavera y el verano de 1906. En ese primer contacto, lo que predomina es su deslumbramiento ante los salones de pintura, las carreras de caballos, las nuevas tendencias artísticas del arte moderno o los conflictos entre nacionalismo y socialismo.

El resto de las glosas que integran la primera parte de este París muestra un análisis más pormenorizado de la realidad parisina: la descripción de la ciudad, de sus edificios y calles, la Sorbona o el Salón de Otoño de pintura son los ejes de un acercamiento menos deslumbrado y más analítico que refleja la importancia que tuvo París en la formación y en la evolución intelectual y estética de d’Ors. Son textos que dan ya la medida de la profundidad concisa que contiene el género dorsiano de la glosa.

Carlos d’Ors ha rescatado para la segunda parte del volumen un libro inédito, que Xènius escribió originalmente en francés en 1938. Se trata de París. Escenas y secretos, cuatro diálogos al modo socrático que permanecían en el archivo familiar y que estaban parcialmente traducidos al inglés. De su traducción al castellano se ha ocupado con resultados muy brillantes Isabel Lacruz Bassols.

La tercera sección del libro recoge otras glosas que d’Ors dedicó a París en diferentes épocas. En muchas de ellas el motivo recurrente es la Torre Eiffel, "una torre republicana – afirma d’Ors oportunamente en 1932-, un símbolo de la soberanía plural."

Santos Domínguez