4/11/09

Arthur Cravan. Maintenant


Arthur Cravan.
Maintenant.
Traducción de
Jèrôme Gauchet y Elena Fons.
El olivo azul. Córdoba, 2009.

En su Colección Errantes, El olivo azul publica los cinco números de Maintenant, la revista que fundó y dirigió Arthur Cravan entre 1912 y 1915.

Poeta de vanguardia, boxeador, pero sobre todo errante, errático y provocador, Arthur Cravan era el seudónimo de Fabian Lloyd, el sobrino francés e inclasificable de Wilde, que fue una referencia constante en la efímera vida de la revista.

Maintenant - Ahora – fue una de las avanzadillas más locas de la vanguardia. El hodiernismo de su título, la constante actitud provocadora, la negación del arte, la propensión a las proclamas resumen algunas de las notas características de las vanguardias que estaban surgiendo del clima cultural previo y posterior al estallido de la Gran Guerra.

Antes de vagar por medio mundo y de ahogarse en 1918 en el Golfo de México, fundió vida y creación y convirtió – como escribe Jèrôme Gauchet en su espléndido prólogo- la literatura en un combate y el boxeo en una parodia.

En ese prólogo -Cravan el provocador- Gauchet intenta la tarea imposible de definir una personalidad tan indefinible como la del vanguardista francés:

¿Qué es lo que define a Arthur Cravan? Lo contrario de lo que decía Séneca a propósito de esos hombres que sólo llegan a avanzada edad para decir que han vivido mucho. Hombre múltiple, Cravan fue sucesiva o simultáneamente según los casos, Fabián, Arthur, inglés, suizo, parisino, catalán, americano, mejicano, poeta, boxeador, conferenciante, viajero, bohemio, ladrón, dandi, enamorado, pugilista, desertor, perezoso, trabajador, irónico, mentiroso, sincero, noble, golfo, hombre, animal, libertino, romántico, pro-futurista, pre-dadaísta, surrealista antes de tiempo, escandaloso, seductor, clásico, vanguardista, bruto, refinado, peligroso, blanco, negro, bailarín, caminante, rebelde, creador, entusiasta, melancólico, amigo, enemigo, moderno, anacrónico, excéntrico, tímido, fiel, infiel, soñador, realista, nadador, futbolista, dormilón, despierto, tierno, fuerte...

Esa enumeración, más que un fracaso en la búsqueda del adjetivo adecuado, es una manera de reconocer que Cravan es un inclasificable.

Además de las notas biográficas sobre Wilde, los manifiestos, los poemas o la crítica violenta de Gide, la recopilación de los cinco números de Maintenant incluye curiosos mensajes publicitarios como este, de la primera entrega:

¿Qué necesita el poeta?
Una buena comida.
¿Dónde la puede encontrar a buen precio?
Chez Jourdan.
Donde se reúnen los poetas,
los chulos,
los boxeadores.

O este otro anuncio de una galería de arte en el nº 4 de Maintenant:

El 2.500 %
¡ESPECULADORES! Compren pintura.
Lo que hoy pague con 200 francos
valdrá 10.000 francos en 10 años.

El último ejemplar que salió a la calle incluía, antes de dos pequeños textos de relleno, el prosopoema Poeta y boxeador, quizá lo más significativo que Cravan publicó en los cinco números.

Santos Domínguez