Molins i Fábrega.
Campos de concentración.
ACVF Ilustración. Madrid, 2007.
No era aquella la Francia a la que les conducía la derrota en aquellos meses de febrero y marzo de 1939. Cientos de miles de españoles de toda edad y condición cruzaron la frontera francesa con la esperanza de una vida nueva en libertad.
Allí la infamia les negaría su dignidad y los sometería al hambre, al frío y a otras vejaciones.
Molins i Fábrega (Gerona, 1910-México, 1964), obrero desde la infancia, se trasladó a Barcelona en la adolescencia, fue autodidacta y lector incansable, y se implicó tempranamente en el movimiento obrero y en las luchas sociales y políticas de Cataluña. Trabajó como periodista y militó en diversas organizaciones de izquierdas hasta llegar a formar parte del comité ejecutivo del POUM. Periodista prolífico en los años de la Segunda República, se exilió al término de la guerra civil en Francia, donde fue hecho prisionero y destinado a un campo de trabajo en el norte de África. En 1940, halló asilo en México, en donde falleció.
Ambos sincronizaron su esfuerzo, su talento y su dolor para responder a los agravios y las humillaciones de los campos de concentración.
Y para dejar testimonio y denuncia conjuntos:
EL HURACÁN Y LA MUERTE se llevaron a muchos de tus compañeros. Tú yaces sepultado en el olvido. (...) Otros se fueron; tú quedaste. Sólo unos humildes, que como tú sufrieron, que saben de no ser en vida, se acuerdan de ti. Por ser humildes, saben da con largueza, pues son ricos de corazón. Ellos y tú, en un día no lejano, coronados con los espinos de tu cementerio, marcharé! radiantes hacia el triunfo.