Alcalá Galiano, Mesonero Romanos, Jovellanos, Capmany, Larra.
Relatos después de la batalla (1808-1823).
Espasa. Fundación Dos de Mayo. Madrid, 2008.
Relatos después de la batalla (1808-1823).
Espasa. Fundación Dos de Mayo. Madrid, 2008.
En Relatos después de la batalla (1808-1823), que edita Espasa con el patrocinio de la Fundación Dos de Mayo, Antonio Fernández García ha preparado e introducido una selección de cinco textos que ofrecen cinco versiones de aquellos hechos, cinco relatos después de la batalla.
Cuatro de esos relatos toman como punto de referencia el Dos de mayo y sus consecuencias, desde el punto de vista de quienes tuvieron un papel relevante en aquellos días o desde el recuerdo.
El artículo primero de la Memoria que escribió Jovellanos para rebatir las calumnias divulgadas contra los individuos de la Junta Central es una justificación de la conducta de aquel ilustrado y una defensa de la legitimidad de la Junta.
El Centinela contra franceses, de Antonio de Capmany, es un folleto propagandístico de tono muy distinto. Es propaganda de guerra, una soflama para desacreditar al francés.
Los diez primeros capítulos de los Recuerdos de un anciano, de Alcalá Galiano y los once primeros de las Memorias de un setentón natural y vecino de Madrid, de Mesonero Romanos tienen el enfoque propio de la memoria autobiográfica, una mayor distancia de los hechos y por tanto un tono más evocador y descriptivo.
Y finalmente, El hombre-globo, es un artículo irónico y divertido de Larra, que parece aludir a Godoy tras distinguir varias tipologías de hombres: sólidos, líquidos y gaseosos. Como la mayoría de sus artículos, no ha perdido actualidad y esas caracterizaciones podrían utilizarse como patrón de análisis del presente. Por eso Larra es ya un clásico, porque su obra no envejece sino que se actualiza en cada lectura posterior.
Todos ellos, con su distinta tonalidad e ideología, desde el progresismo ilustrado al tradicionalismo conservador, con su análisis intelectual o con su tono incendiario y visceral, con la melancolía del recuerdo o con la ironía del romántico, dan idea cabal de la complejidad y la transcendencia de aquellos acontecimientos que marcaron para bien y para mal nuestra historia contemporánea.
Cuatro de esos relatos toman como punto de referencia el Dos de mayo y sus consecuencias, desde el punto de vista de quienes tuvieron un papel relevante en aquellos días o desde el recuerdo.
El artículo primero de la Memoria que escribió Jovellanos para rebatir las calumnias divulgadas contra los individuos de la Junta Central es una justificación de la conducta de aquel ilustrado y una defensa de la legitimidad de la Junta.
El Centinela contra franceses, de Antonio de Capmany, es un folleto propagandístico de tono muy distinto. Es propaganda de guerra, una soflama para desacreditar al francés.
Los diez primeros capítulos de los Recuerdos de un anciano, de Alcalá Galiano y los once primeros de las Memorias de un setentón natural y vecino de Madrid, de Mesonero Romanos tienen el enfoque propio de la memoria autobiográfica, una mayor distancia de los hechos y por tanto un tono más evocador y descriptivo.
Y finalmente, El hombre-globo, es un artículo irónico y divertido de Larra, que parece aludir a Godoy tras distinguir varias tipologías de hombres: sólidos, líquidos y gaseosos. Como la mayoría de sus artículos, no ha perdido actualidad y esas caracterizaciones podrían utilizarse como patrón de análisis del presente. Por eso Larra es ya un clásico, porque su obra no envejece sino que se actualiza en cada lectura posterior.
Todos ellos, con su distinta tonalidad e ideología, desde el progresismo ilustrado al tradicionalismo conservador, con su análisis intelectual o con su tono incendiario y visceral, con la melancolía del recuerdo o con la ironía del romántico, dan idea cabal de la complejidad y la transcendencia de aquellos acontecimientos que marcaron para bien y para mal nuestra historia contemporánea.
Luis E. Aldave