Juan Bravo Castillo.
Grandes hitos de la historia
de la novela euroamericana.
Cátedra. Madrid, 2016.
Si hay un rasgo llamativo que define el siglo XX en el terreno de la cultura es la aceleración vertiginosa con la que se suceden los movimientos artísticos y literarios. No es este el lugar para explicar las razones de esa velocidad con la que unas tendencias suceden a otras, pero sí es el momento de anotar que en el género de la novela esa sucesión de tendencias tiene uno de sus ámbitos más reconocibles, desde que en las primeras décadas del siglo, en torno a la Primera Guerra Mundial, se produce una ruptura sistemática con la novela realista y naturalista del XIX.
Y por eso tiene un mérito especial la difícil empresa que aborda Juan Bravo Castillo en el tercer volumen de su monumental Grandes hitos de la historia de la novela euroamericana que acaba de aparecer en la colección de crítica y estudios literarios de la editorial Cátedra.
Sus casi mil quinientas páginas apenas pueden recoger, tras el brillante ejercicio de síntesis de su introducción, un complejo panorama de la novela contemporánea desde los comienzos del XX hasta la actualidad hasta Thomas Pynchon, E. L. Doctorow, Modiano o Paul Auster.
Tras este panorama general de más de un centenar de páginas, los diecinueve capítulos en los que se organiza el libro abordan la obra de los autores fundamentales que han diseñado ese espectacular edificio literario que es la novela del siglo XX.
De Joseph Conrad a la renovadora novela hispanoamericana, pasando por cimas como Kafka, Proust, Joyce y Thomas Mann, por el objetivismo novelesco de Hemingway o el intimismo psicológico de Virginia Woolf, por el experimentalismo al límite de Faulkner o el nouveau roman francés.
Un libro de consulta imprescindible para entender las claves de la ruptura radical que afecta a todos los niveles temáticos, estructurales y estilísticos del género. Una ruptura que se produce al hilo de una nueva percepción del tiempo y de una nueva mirada en la que tiene mucha influencia la técnica constructiva del lenguaje cinematográfico o la indagación en la realidad a través del periodismo o las distintas corrientes ideológicas y filosóficas del siglo XX.
Antonio Pau.
Rilke y la música.
Trotta. Madrid, 2016.
Rilke mantuvo con la música una relación problemática que empezó en la aversión y el rechazo que le producía un arte que veía como rival peligroso de la poesía, como una actividad incompatible con la poesía, que debía crear su propia música y escuchar la melodía de las cosas.
Probablemente exageró su incapacidad musical para reivindicar ese silencio creador que le permitiera oír el canto de las cosas. Y por eso en sus primeros poemas la música encarcela al alma y perturba la creatividad. Pero en sus últimos años cambió su actitud hacia la música. Algunas experiencias, como la música de Beethoven, y algunas lecturas le acaban revelando que, como los ángeles del Greco, la música une lo visible y lo invisible, lo terrenal y lo celeste desde el ámbito de lo misterioso.
Sobre ese proceso organiza Antonio Pau los quince capítulos de su ensayo Rilke y la música, que acaba de publicar Trotta. Una indagación que explora el lugar de la música en la poesía de Rilke tras su relación con algún compositor, o con pianistas y violinistas como Alma Moodie, con quien –aventura Antonio Pau- pasó la que quizá fuese la mejor tarde de su vida escuchando piezas de Bach en el castillo de Muzot.
Ese cambio de actitud se traduciría en sus poemas, y ya en 1918 Rilke está en condiciones de escribir su poema 'A la música'. Una música que ocupa un lugar central en las Elegías de Duino y en los Sonetos que dedicó a Orfeo, el padre de la música y la poesía.
A esas alturas de su obra la música aparece como un arte que arrebata y consuela. Ya no es la música que impedía el silencio creador: ahora es “agua de nuestra fuente” y “más que nosotros”, como escribió en su último poema de tema musical, el que dedicó al violonchelista Lorenz Lehr la tarde que le visitó en el torreón de Muzot para que le firmara un ejemplar de las Elegías.
Rafael Sánchez Ferlosio.
Ensayos 3
Babel contra Babel.
Edición de Ignacio Echevarría.
Debate. Barcelona, 2016.
“Desde que el ilustrísimo señor obispo de Córdoba tuvo la fecunda idea de aprovechar su amistad personal con el emperador para venderle la sangre de Jesús Nazareno a cambio del imperio, la Iglesia romana, salvo honrosas y emocionantes excepciones medievales, se ha interesado siempre mucho más por las leyes que por las conciencias.”
Así comienza “Tibi dabo”, un artículo de 1980 que abre la primera parte de Babel contra Babel, el tercer volumen de los ensayos de Rafael Sánchez Ferlosio, que publica Debate.
Están en esas líneas algunos de los ejes temáticos que vertebran este volumen en el que se agrupan artículos y ensayos unidos por el tema de la guerra y la política internacional y organizados por el responsable de la edición, Ignacio Echevarría, que explica así el título: “El título de este volumen repite el de uno de los artículos que contiene, «Babel contra Babel» (1990), donde se plantea un esclarecedor y decisivo contraste entre «la antigua y auténtica ética de guerra» y la «ética universalista» que en la actualidad justifica y fomenta un constante aprovisionamiento de armas y que, «por impulso de su propio absolutismo», tiende a invertir el sentido de sus designios declarados, abocándonos a una «directa regresión a la barbarie».”
Organizado en ocho secciones -Asuntos internacionales, De re militari, Sobre la guerra, I; Sobre la guerra, II; La primera guerra de Irak, La segunda guerra de Irak, Últimos partes y Apuntes de polemología, que podría haber servido también de título de esta recopilación- en sus páginas aborda Ferlosio episodios como la guerra de las Malvinas, la situación en Oriente Medio, las dos guerras de Irak o las políticas exteriores de Estados Unidos o del Vaticano.
Se recogen en este tomo ensayos como La hija de la guerra y la madre de la patria, o Carácter y destino y artículos fundamentales como "Las guerras por-si-acaso", "Hipótesis de Faluya" o "Historia e identidad", convertido en esta edición en prolegómeno a Apuntes de polemología.
Un volumen que se cierra con un anexo, “O religión o Historia”, que resume el espíritu de los textos de este libro y sus motivos esenciales, articulados en torno al tema de la guerra. Porque, como escribía en “Las azoteas de Damasco”, un artículo de 1992 que se recupera como prefacio de este volumen, “uno no dejará de preguntarse nunca qué es la guerra. ¿Es el terrible flagelo de las gentes, la agonía de los hombres, el terror de las madres y de las esposas, el diezmador o destructor de las familias, el desamparo y la miseria de viudas y de huérfanos? ¿O es la exultante autorrealización y autocumplimiento de los pueblos, el momento de la suprema plenitud colectiva para la comunidad que los integra?”
José Luis Pardo.
Estética de lo peor.
Pasos Perdidos. Madrid, 2016.
"La sociedad burguesa moderna ha creado la ilusión de que la belleza consiste justamente en construir cosas que no tienen utilidad, que son más sublimes que las útiles, precisamente porque la sociedad burguesa moderna considera que hay algo más sublime que el valor de uso, a saber, el valor de cambio." Esas palabras, que forman parte del prólogo dialogado entre Cipión y Berganza sobre las relaciones entre el arte y todo los demás, anuncian una de las líneas fundamentales de los ensayos que José Luis Pardo ha recopilado en su Estética de lo peor, que publica Pasos Perdidos.
José Luis Pardo, uno de los ensayistas más lúcidos del panorama filosófico español, reúne en este volumen, bajo el subtítulo 'De las ventajas e inconvenientes del arte para la vida', diecisiete textos dispersos en revistas o en obras colectivas sobre el papel del arte en el mundo contemporáneo, sobre su renuncia a la libertad y su subordinación a la lógica del mercado en una época como la actual, en la que "la estética se ha convertido en la ideología de una época que presume de no tener ninguna."
Entre el ensayo breve y el artículo, algunos de ellos, como "La carne de las máquinas", "Crear de la nada. Ensayo sobre la falta de oficio" o "Los pájaros de la lengua", podrían figurar en cualquier exigente antología de pensadores actuales.
Tomás Cavanna.
Tumba revuelta.
Cara y cruz de la Fundación Cela.
Renacimiento. Sevilla, 2016.
Cara y cruz de la Fundación Cela es el subtítulo del volumen que Tomás Cavanna Benet publica en Renacimiento con el propósito de rememorar su experiencia al frente de la Fundación Camilo José Cela.
Su autor, que fue director gerente de la Fundación desde mayo de 1993 hasta 2010, ha elegido un título -Tumba revuelta- que parodia significativamente el de aquella colección de artículos que Cela reunió en el volumen Mesa revuelta.
Un recorrido por la historia y las circunstancias de la Fundación Cela, de las que inevitablemente emerge la descripción de un conflictivo panorama político y literario y las no siempre limpias corrientes subterráneas de influencias y rivalidades, ambiciones y envidias que recorren estos episodios de la historia cultural de las últimas décadas.
Un recorrido crítico jalonado por nombres relevantes que a veces no salen bien parados. Los aduladores arrimados al poder, los conflictos familiares, el papel de las instituciones completan la descripción de una feria de vanidades que no es sólo un paisaje de fondo, sino que se convierte a menudo en el centro del cuadro.
Y en ese itinerario, las relaciones conflictivas con los novelistas jóvenes, la cucaña y los trepas, la diversa clase de tropa que formó parte del círculo del novelista, figurantes o protagonistas de un elocuente álbum de imágenes que se ofrecen en un apéndice.
Como complemento gráfico de las páginas de este libro, esas imágenes resumen un espectáculo a veces poco edificante, que refleja cómo se han mezclado política, literatura e intereses económicos en las últimas décadas en la vida cultural española.
Tomás Rodríguez Reyes.
Las contemplaciones.
La Isla de Siltolá. Colección Levante.
Sevilla, 2016.
Tras el diario Escribir la lectura y el ensayo literario Ars vivendi, editados también en La Isla de Siltolá, Tomás Rodríguez Reyes publica Las contemplaciones, tercera entrega de su obra en marcha Trópico de la Mancha.
Como anuncia la cita de Valéry que lo abre, no se trata de un diario en sentido estricto sino de las anotaciones de momentos fecundos de lectura, reflexión y vida. Por eso, a diferencia de los dos tomos precedentes, aquí no hay precisión diaria, sólo indicación de los meses de 2011 en los que se van sucediendo las notas de un lector que no solo busca en los libros la luz sino que proyecta su propia lucidez en ellos.
La lectura como forma de vida y como búsqueda de revelaciones y de una armonía y una luz que otorgan también la música y la pintura, los lugares y la memoria de quien, a la manera de Juan Ramón, hace de la estética una ética.
Una suma de contemplaciones, estados que preceden al conocimiento, la reflexión honda y constante sobre la palabra y la poesía, sobre el tiempo y el paisaje en la prosa pulida de un poeta admirable, de un hombre en busca del fuego inaugural, porque “sólo quien conoce la excelencia de la literatura se atreve a reclinarse y asentir paulinamente en la transparencia de los otros.”
Jorge M. Reverte.
Mario Martínez Zauner.
De Madrid al Ebro.
Las grandes batallas de la guerra civil española.
Documentación de Ignacio D’Olhaberriague Martínez.
Galaxia Gutenberg. Barcelona, 2016.
“Entender la guerra civil española sólo es posible si se parte de un hecho: ninguno de sus protagonistas sabía con anterioridad que estaba embarcándose en un conflicto de tanta envergadura, para el que no tenían los medios humanos ni financieros necesarios, ni los conocimientos técnicos imprescindibles”, escribe Jorge M. Reverte en la introducción de De Madrid al Ebro, el volumen de título sutilmente paródico que acaba de publicar en Galaxia Gutenberg con la colaboración de Mario Martínez Zauner y el apoyo documental de Ignacio D’Olhaberriague Martínez
Un relato organizado alrededor de batallas y frentes documentados con veintisiete mapas que reflejan el desarrollo de un conflicto bélico que empezó siendo un golpe militar frustrado y acabó convirtiéndose en una guerra de exterminio y destrucción masiva a lo largo de casi tres años. Desde el triunfo y fracaso de aquel pronunciamiento inicial de julio de 1936 hasta la batalla del Ebro, la mayor que se ha producido nunca en territorio español, decisiva en la caída de Cataluña y en la rendición final de Madrid, un recorrido en trece capítulos que toma como punto de partida ese planteamiento inicial para acabar desmintiendo la idea extendida de que Franco quería una guerra larga y posponer la toma de Madrid por conveniencias políticas.
La tesis de este libro es que el paso del golpe de estado a una situación de guerra y la prolongación del conflicto armado no fue el resultado de una estrategia, sino una imposición de las circunstancias, porque frente a la mayoría del ejército sublevado la defensa de la República se llevó a cabo con las fuerzas del orden y las milicias de los partidos que fueron la base de la configuración del Ejército Popular. Un ejército que hizo frente a los rebeldes durante esos tres años y articuló la resistencia de una parte importante de la población, enfrentada en lucha desigual a la potencia un ejército organizado y a la enorme capacidad destructiva de las fuerzas coloniales.
Desde los primeros combates en el interior de las ciudades, donde se aplastó a los sublevados o a los leales, hasta la configuración del conflicto como una guerra moderna por tierra, mar y aire, las grandes batallas empezaron tras la batalla de Madrid, que frustró una toma rápida de la capital en noviembre de 1936.
Se sucedieron a partir de entonces las batallas que se estudian en este libro, con cinco intentos intermedios de tomar Madrid. Se distinguen aquí cuatro fases en la guerra civil: desde el avance hacia Madrid por el sur y el norte hasta la decisiva batalla del Ebro que inclinó definitivamente la victoria del lado franquista, pasando por el desplazamiento de las operaciones militares hacia el norte, desde Brunete, y hacia el Este, desde Belchite y Teruel, en una estrategia cuyo triunfo supuso que se partiera en dos la España republicana.
Un estudio riguroso con el que Jorge M. Reverte confirma que, como indicó Antony Beevor, es el mejor historiador militar español: el Jarama, Guadalajara, Brunete, Belchite, Teruel o el Ebro son la base de una reinterpretación del conflicto bélico que se suma a sus libros anteriores: La batalla del Ebro, La batalla de Madrid, La caída de Cataluña o El arte de matar.
Santos Domínguez