18/5/13

La Transición para adultos




Alfredo Grimaldos.
Claves de la Transición 1973-1986 
(Para adultos).
Península. Barcelona, 2013.

Autor de una imprescindible Historia social del flamenco que también apareció en Península y que ha llegado ya a su tercera edición, y del valiente y silenciado Zaplana, el brazo incorrupto del PP, Alfredo Grimaldos acaba de publicar un análisis crítico y desmitificador de la Transición española con la oportuna e irónica matización Para adultos. 

Y es que nos han contado ese proceso histórico que comienza con el magnicidio de Carrero Blanco y se cierra con el referéndum de la OTAN como si fuéramos prepúberes. 

Lo que pretende un libro como este es contrarrestar el silencio, la ocultación, el olvido y la falsificación del pasado sobre los que se ha construido la imagen oficial de la Transición.

Una imagen que evita hablar de la realidad en su crudeza: desde la ilegimitidad democrática de origen de una monarquía sucesora del franquismo a la configuración del estado criptoconfesional que sigue siendo España, pasando por los últimos crímenes del franquismo, por la represión policial, la persistencia de las togas neofranquistas, la rendición ante una conferencia episcopal que cobra hoy  mucho más dinero que con Franco o con Aznar, la tutela militar o la vigilancia de Estados Unidos para mantener unas estructuras de poder que la Transición maquilla pero no rompe.

Una Transición que no solo evitó la limpieza de las estructuras franquistas, sino que fue controlada y dirigida por políticos como Suárez, Martín Villa, Pío Cabanillas o Gabriel Cisneros que venían directamente de las camisas azules de la dictadura. 

Todo eso se ha disimulado y se ha hecho una mitificación de la mentira a través de una abundante bibliografía que ha tergiversado la realidad y de series televisivas que han reescrito la historia como un cuento para niños.

Casi a la vez que se reedita en un espléndido volumen en Debolsillo Una, grande y libre, con las tiras que Carlos Giménez publicó en El Papus en los años setenta, este libro de Alfredo Grimaldos es un intento de desmentir tanta falsificación edulcorada de unos años en los que el terrorismo de estado produjo más de un centenar de víctimas -de Almería a Vitoria, de Montejurra a Tenerife- entre los militantes de la izquierda y los aparatos represivos franquistas ejercieron su actividad siniestra desde las mismas cloacas del poder y al amparo protector de los magistrados afines a la extrema derecha, que entonces eran casi todos.

La conocida táctica del policía bueno- policía malo, llevada a la política, logró imponer las reglas del juego -reforma frente a ruptura, sistema electoral, redacción de la Constitución- a base del chantaje y la amenaza permanente del golpe militar. El resultado fue esa desvergüenza posibilista que llamó consenso a lo que era una claudicación y pacto a lo que fue una humillante traición.

Y así la Transición acabó engendrando un monstruo en el que se fundían –las palabras son de García Trevijano- el rostro atroz de la tiranía y la cara dura de la ambición clandestina. A ese monstruo se le llamó consenso.

Un antídoto contra la mentira y contra los cuentos para niños.
Luis E. Aldave