Javier Sainz de los Terreros.
Los tesoros del Prado.
Montena / Museo del Prado. Barcelona, 2023.
Esta Mona Lisa, del taller de Leonardo, es una de las veinticinco pinturas que se analizan en Los tesoros del Prado, que coeditan en un magnífico volumen Montena y el Museo del Prado.
Un libro que, como señala en la presentación Javier Sainz de los Terreros, responsable de redes sociales del Museo Nacional del Prado y de los textos de este volumen, está “inspirado fundamentalmente en la labor que realiza el Museo del Prado en sus redes sociales. Con más de cuatro millones de seguidores, nos esforzamos por acercar el museo al público y ofrecer los medios necesarios para que todo el mundo pueda disfrutar de una colección tan excepcional.Con este objetivo, desde 2017 llevamos realizando vídeos en directo en Instagram, donde comentamos diferentes obras y mostramos el día a día de la institución.”
De entre los más de mil vídeos realizados, se han seleccionado veinticinco obras que, desde un Tiziano poco conocido hasta Las Meninas, proponen un recorrido visual generoso en ilustraciones y en detalles y guiado por espléndidos comentarios en textos esclarecedores sobre su técnica, su temática o su contenido histórico o simbólico:
El lenguaje simbólico del retrato de Federico Gonzaga, I duque de Mantua, de Tiziano; el paisaje del fondo de la Mona Lisa, del taller de Leonardo, que se recuperó al retirar el fondo negro en la restauración de 2011; los detalles inducidos con luz ultravioleta en la escena compleja y sencilla a la vez de la caída camino del Calvario en El pasmo de Sicilia, de Rafael; la atmósfera realista en la Juana la Loca de Francisco Pradilla; el trampantojo engañoso del Descendimiento de Van der Weyden, entre la pintura, la escultura y la arquitectura; el derroche visual y la fiesta de los sentidos de los bodegones barrocos de Clara Peeters; el carácter inagotable del Tríptico del Jardín de las Delicias, del Bosco; el punto de fuga en la perspectiva de El Lavatorio, de Tintoretto; el baile de los árboles en La bacanal de los andrios, de Tiziano; los dos caminos que salen de la Laguna Estigia en el cuadro de Patinir; la coreografía de La gallina ciega, de Goya; los símbolos de la fugacidad de Las Edades y la Muerte, de Hans Baldung Grien; las múltiples lecturas posibles de Las Hilanderas o La fábula de Aracne; el terror de la escena de Saturno devorando a un hijo, de Rubens; el misticismo luminoso y cromático de La adoración de los pastores, del Greco; la doble L del Autorretrato de Durero; un recorrido por las catorce pinturas negras de Goya y el strappo con el que se trasladaron los frescos de las paredes de la Quinta del sordo al lienzo; la pintura del aire en Las Meninas; el arte de la composición en Las lanzas; las plantas y las flores simbólicas que pintó Fra Angelico en La Anunciación; la nostalgia por la antigüedad clásica en La adoración de los Magos, de Rubens; la violencia pintada por Goya en La lucha con los mamelucos y Los fusilamientos del 2 de mayo; la perspectiva aérea y las luces y las sombras de La fragua de Vulcano o los problemas de atribución de la Isabel de Valois de Sofonisba Anguissola.
Un libro en el que no falta una intrahistoria del canon, porque cuando Fernando VII inauguró el museo, la obra más valorada era la Caída camino del Calvario, de Rafael, que, tras pasar de la tabla original al lienzo actual, ocupó la sala número 12, la más importante de la institución, que luego sería para Velázquez. La descripción de la leyenda que rodea a esta obra, que sobrevivió a un naufragio, y la lectura de la escena desde el soldado del caballo blanco de la derecha, su estructura en X, sus simetrías y los juegos de color que unen en el azul de los ropajes al hijo y a la madre en el trance violento de la separación desgarradora, son sólo un ejemplo del magnífico despliegue interpretativo de los textos de Javier Sainz de los Terreros para este volumen.
“Al igual que con los vídeos, la intención de este libro es despertar la curiosidad del lector y animarle a que visite el Museo del Prado”, concluye Javier Sainz de los Terreros en la presentación del libro, sin duda uno de los mejor editados del año que termina.
Santos Domínguez