8/9/23

Ferrer Lerín. Poesía reunida


Francisco Ferrer Lerín.
Poesía reunida (1959-2022).
Edición de Aurelio Major.
Tusquets. Barcelona, 2023.

 Como “poeta, lexicógrafo, narrador, onirófago, propagador del arte casual y ornitólogo” define Aurelio Major a Francisco Ferrer Lerín (Barcelona,1942) en el epílogo a la edición de su Poesía reunida (1959-2022) que publica Tusquets.

La abre este poema, el que abría también su primer libro, De las condiciones humanas:

Que engaño al mundo
que nadie sabe la verdad de mi existencia 
y de las altas glorias que albergo.

Que mintiendo y transformando lo que por mí pasa 
agoto la esperanza de los zaheridos por mi lengua 
nublo el son de sus vidas
y la gruesa fruta resbala entre mis dedos 
aniquilándose.

Ya la rueda enorme camina sobresaltada 
sus radios disformes confundidos
y ella representa toda elocuencia
y disimulo de risas.

Ya la leña patente a cualquier ojo
crepita indemne a la fuerza de vuestras hoces 
vendida a mí
y a todo lo que represento.

También
es posible acabar con la cabeza aplastada
o con el latido fresco del potro vibrando en derredor
y también
notar en el estómago un tenue vacío
o una bala reluciente adherida a las capas más hondas.

Por lo tanto
prefiero desnudar mi gigantesca valía en presencia de los pueblos 
recibiendo así el tributo magistral
honra y prez a los grandes
y sus nemigas inocentes apuntalando mi huida.

Desde ese libro inicial, de 1964, hasta Grafo pez (2020), pasando por Cónsul, Fámulo, Hiela sangre o Libro de la confusión, se reúnen en este volumen los siete libros de poesía de Ferrer Lerín, a los que se suman cuatro textos inéditos.

En los anejos -Edad del insecto- se recogen textos escritos entre 1959 y 1989, laterales a los libros reunidos en esta edición que incorpora también algunos de los prólogos que los presentaron. Entre ellos, el de Gimferrer a Cónsul, donde destaca que “la poesía, ante todo, debe ser exploración y revelación.”

Poesía intuitiva, visionaria y provocadora que se instala en el territorio pantanoso de la postvanguardia, entre el experimentalismo y la intertextualidad, para construir desde la extrañeza una poética extrema y marginal, una escritura en libertad, heterodoxa y de condición radical, como se ha destacado en algún estudio sobre su obra. Como “un poeta del enigma, del desmán, del arcano, del rijo, del sindiós, del crimen y de la casquería” lo definió Félix de Azúa.

Con un largo periodo de silencio entre Cónsul (1987) y Fámulo (2009), la poesía de Ferrer Lerín va cambiando de tono de voz y emprende también a partir de ese libro un camino hacia la claridad. Poemas como este, del Libro de la confusión (2019) lo reflejan:

DEJAS ATRÁS

Dejas atrás la blusa de organdí con que excitabas a Infausto,
la orquesta de charanga principal en los festejos del Día de los Ángeles,
el revuelto de ajos tiernos que incomodaba a Gato Cero
y la macedonia de frutas tropicales
dedicada al recuento de las moscas de la carne.

También dejas atrás la lectura de Seferis,
la hormigonera de juguete comprada en el mercadillo de Parque Ministerios,
las bombillas fundidas del vestidor de los domingos
y el ruido endiablado del cambio de marchas de nuestro primer descapotable.

Te quiero Conchita tal como fuiste en los primeros años,
tal como fuiste en la época de esplendor que duró tan poco,
tal como fuiste en el griterío de la sordera y la escasa claridad,
tal como eres ahora blanca y sonriente en esta caja de pino.

Empujan los soldados corpulentos de uniforme verdoso,
parecen tener prisa en este trámite vulgar,
quizá teman que el calor y la humedad pudran la mano
que cuelga fuera intentando despedirse del mundo
o quizá agarrarse a la mía,
también colgante.

O este intenso ‘Término’, que cerraba su último Grafo pez:

Nada hay al otro lado 
que no haya sido dicho.

En busca sólo de alimento 
¿que mirar todavía?

Un viento amargo inunda la ciudad, 
las ciudades del sueño 
donde duerme 
la memoria del sueño.

Lenguas de fuego, dónde 
lo apenas entrevisto, 
lo casi 
no entredicho.

Y qué final.

Esta edición se propone -en palabras de Aurelio Major- “delinear una imagen posible, con todas las cautelas del caso, de un implícito texto y ritmo originales en la obra de Francisco Ferrer Lerín, habida cuenta de que se trata aquí de una poesía del riesgo, siempre inestable en el marco cambiante del verso, el poema en prosa, el caligrama, la cita, el guion, el cuento, el informe, el centón, el teatro; y de los propios restos biográficos, cuya carroña, conviene reiterarlo para circunscribir el equívoco y enterrarlo, es devorada, digerida y sobre todo tergiversada en sus poemas.”

Santos Domínguez