Gonzalo Calcedo.
Las inglesas.
Menoscuarto. Palencia, 2015.
Deseo de ser piel roja se titula un conocido relato de Kafka. Mucho más modesto es el deseo de ser inglesas que une a la narradora y a su amiga Sandra, compañera de instituto, en el cuento que cierra y da título al volumen Las inglesas, que reúne nueve relatos de Gonzalo Calcedo en la colección Reloj de arena de la editorial Menoscuarto.
En ese último relato, que arranca del efecto que produce en dos muchachas la deslumbrante libertad de costumbres e indumentaria de unas jóvenes inglesas de vacaciones en un pueblo costero, se resumen algunas de las claves temáticas y técnicas de un conjunto que tiene como eje de referencia los ritos de paso del mundo adolescente.
Los nueve relatos del libro están narrados en primera persona por muchachos o muchachas de instituto que experimentan un conflictivo proceso de crecimiento personal en el que lo que empieza como un juego de afirmación de la identidad acaba trágicamente en medio de un mundo hostil.
Con finales abiertos o cerrados, con situaciones muy variadas, a esos narradores subjetivos los unen unas circunstancias y unos impulsos parecidos: su voluntad de huida entre el miedo y las indecisiones, el peso del entorno familiar, la rebeldía y el ansia de libertad, el descubrimiento del sexo y de la muerte, la construcción de la personalidad propia y una cierta sensación de desamparo y soledad.
Junto con el primero –Tesoros- y el que ocupa el lugar central -Lo que tuvimos- ese cuento final constituye la columna vertebral de un libro que vuelve a confirmar la solvencia narrativa de Calcedo, la agilidad de su prosa eficaz y la fuerza convincente de sus diálogos vivos.
Santos Domínguez